El sábado 23 de mayo estuvimos de ruta con el grupo de senderismo del Aula de Cultura Valle Inclán, por segundo año consecutivo visitamos un espacio natural y aprendemos caminando.
En esta ocasión hemos visitado el Valle de los Milagros en el Parque Natural del Alto Tajo (Guadalajara). Se trata de un espacio que presenta una diversidad geológica y paisajística espectacular y en la que podemos encontrar muchos contrastes que realmente nos dejaron impresionad@s.
Salimos desde el barrio de Aluche a las 8:00 y tras parar a mitad de camino llegamos a Riba de Saélices. Desde el pueblo comenzamos a caminar entre campos de cultivo por un camino que nos llevaba direct@s al comienzo del valle que forma el río Linares.
Llegamos a un merendero cercano a la Cueva de los Casares marcado por la tragedia, justo en este punto se originó un incendio el verano del 2005 que modificó el paisaje por el que íbamos a empezar a caminar y dónde perdieron la vida 11 personas del retén de Cogolludo que luchaban contra el fuego. Desde aquí nuestras más sinceras condolencias a familiares y amigos y el reconocimiento a los trabajadores de los servicios de prevención y control de incendios que año tras año arriesgan su vida demostrando su coraje y valentía.
Tras explicar un sencillo juego que consistía en identificar un habitante del Valle de los Milagros que cada persona llevaba enganchado en la mochila nos pusimos a caminar.
Se trata de una ruta de 13 kilómetros aproximadamente que discurre por distintos materiales. Comenzamos observando las crestas calizas en la parte superior de los cortados sobre areniscas, nos adentramos en un cañon de pizarras para volver a las areniscas y acabar en el pueblo de Santa María del Espino rodeado de campos de naturaleza caliza.
El camino es muy divertido ya que es necesario ir cruzando el río para seguir avanzando por los pasos señalizados y aunque algun@s metimos el pie en el río no hubo problema ya que íbamos bien equipad@s.
Llegamos a la zona de Los Milagros y quedamos sorprendidos con la belleza de este espacio, la tranquilidad que se respiraba y la majestuosidad de las formaciones. Irene aprovecho para explicarnos como se habían formado, las diferencias entre los distintos sustratos y la vegetación asociada, además hicimos un esfuerzo por comprimir la historia geológica en un año y darnos cuenta que las personas llevamos poquísimo pisando la Tierra.
Tras un pequeño almuerzo nos pusimos en marcha y nos adentramos en el cañon de pizarras, una zona espectacular en la que aún se conservan ejemplares centenarios de Arce de Montpellier (Acer Monspessulanum) y Fresno (Fraxinus angustifolia) y Roble albar (Quercus petraea).
Cuando salimos del cañon de pizarra para volver a la zona de areniscas hicimos una parada para comer y con la ayuda del viento pudimos estar un rato agradable bajo el sol, ya que las sombras son muy escasas.
Tras esta parada continuamos el camino hasta llegar al pueblo de Santa María del Espino dónde nos esperaba el autobús. Antes de regresar realizamos el estiramiento correspondiente y despedimos el curso del Aula Valle Inclán degustando deliciosas rosquillas y tarta de limón acompañadas con sidra.
Por el camino pudimos aprender curiosidades sobre el buitre leonado (Gyps fulvus) que aprovecha los cortados para establecer sus nidos y convive con las chovas piquirrojas (Pyrrhocorax pyrrhocorax),. Además pudimos observar varios lagartos ocelados (Timon lepidus) y una bonita pareja de Alimoche (Neophron percnopterus).
Pasamos un día estupendo, siempre es un placer salir al campo con vosotr@s y más en entornos como el Valle de los Milagros tan desconocido que no nos cruzamos con nadie durante todo el recorrido.
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